"2.
La
insuficiente rentabilidad está probablemente en la base del modelo de
desarrollo (neo)liberal dominante en Europa durante las últimas décadas. La
persecución de los sindicatos, la evolución de los salarios por debajo de la
productividad, la contención impositiva, del gasto social, de la progresividad
fiscal, … el conjunto de las políticas (neo)liberales han tenido como objetivo
aumentar la rentabilidad del capital a costa de las retribuciones directas o
indirectas del trabajo. Una lucha constante que, a pesar de haber corregido la
tendencia a la caída de rentabilidad de los años 70, no parece haber conseguido
elevarla a un nivel suficiente".