AGENDA POLÍTICA Y MODELO DE DESARROLLO
TEXTO (PDF): https://yadi.sk/i/oviu4n5IMZEeXA
1.
Para que sea
posible el debate sobre el modelo de desarrollo es necesario, por supuesto, que
al menos este tema esté situado en la agenda política europea, ya sea en la de
las instituciones comunes, ya sea en los estados-miembros clave.
2.
Situar el
modelo de desarrollo en la agenda política no precisa que se utilice esta
terminología ni que en los debates políticos se sitúe el futuro de la economía
europea para analizar de forma conjunta los distintos retos de la misma.
3.
La clave de
la cuestión radica en que los grandes retos del desarrollo económico europeo
estén realmente presentes en los debates políticos con la importancia que
merecen.
4.
Éste es,
precisamente uno de los temas pendientes del contexto político europeo. Por
razones difíciles de entender, las instituciones europeas llevan décadas
esquivando sistemáticamente los grandes retos de nuestro desarrollo económico,
para centrarse en debates eternos sobre “pájaros y flores”.
5.
La clase política
europea se pierde en palabras bonitas alrededor del “desarrollo sostenible”, el
“desarrollo inclusivo”, la “economía circular”, etc, -siempre al compás
establecido por las corporaciones- mientras se hace caso omiso a los grandes
retos estructurales europeos.
6.
Para empezar,
difícilmente encontraremos un reto de mayor importancia a largo plazo que el hundimiento
demográfico. Y no es un problema de ahora mismo, sino que se evidenció ya hace
medio siglo. Resulta sorprendente que nuestras políticas públicas se hayan
mantenido tan increíblemente pasivas al respecto. Y resulta difícil de creer que
la demografía no esté incluida en primera línea en los retos estratégicos de
nuestros estados y de la propia Unión Europea, y que ni siquiera se mencione
entre los objetivos a medio o largo plazo.
7.
Continuemos
con el sobre-endeudamiento. Un reto de primer orden en un modelo económico como
el actual, que ha demostrado no saber mantenerse sin un incremento constante de
deuda. El debate sobre cómo abordamos cuanto antes el inevitable proceso de
desapalancamiento es inexistente. Como lo es el de cómo ponemos en marcha un
modelo de crecimiento sin sobre-endeudamiento. Difícil de entender, como lo es
nuestra indiferencia frente a la permanentemente aletargada inversión
productiva.
8.
Que, en este
contexto, nos atrevamos a utilizar de forma constante y abusiva el término “desarrollo
sostenible” es chocante. ¿Qué clase de desarrollo sostenible puede haber en un
modelo basado en el hundimiento demográfico y en un incremento constante de la
deuda? Evidentemente, ninguno.
9.
Europa tiene
ante sí retos estructurales ciertamente complicados. Pero ningún reto se
resuelve si no se comienza al menos situándolo en la agenda política. La agenda
política europea necesita un vuelco de 180 grados.
“EL FUTURO DE
EUROPA. Bases para un nuevo modelo”
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