INFLACIÓN. LA HUELLA DE BLACKROCK

1.     Aunque apenas ha sido destacado en los análisis, a lo largo de los dos últimos años hemos asistido a un cambio radical en el enfoque de las políticas monetarias occidentales y, en particular, de la desarrollada por la Reserva Federal de Estados Unidos.

2.     El cambio se ha hecho efectivo a través de la estrategia “Going Direct” propuesta por BlackRock, aplicada por la Reserva Federal a partir de Octubre de 2019 y adaptada al contexto europeo por el BCE desde Septiembre de ese mismo año.

3.     A partir de esas fechas, se introduce una modificación sustancial en los instrumentos de la política monetaria expansiva occidental. Es bien conocido que estas políticas monetarias han sido permanente y agresivamente expansivas desde el estallido de la crisis financiera en 2008/2009. Sin embargo, en este momento estamos asistiendo a un salto cualitativo fundamental que se basa en que la expansión monetaria -que, hasta ahora, se centraba en inyectar recursos al sector financiero- a partir de ahora se traslada directamente al mercado de productos y servicios y, de esta forma, alienta de forma directa la inflación.

4.     La expansión monetaria de la última década, constituyó en realidad, más que un instrumento para revitalizar la economía europea, un instrumento para el rescate de las grandes entidades financieras, en sustitución de los rescates con cargo a los presupuestos de los gobiernos, ya agotados y con un importante coste político.

5.     Pero esa expansión monetaria, que parecía haber agotado sus posibilidades de dinamizar la economía europea, ha sufrido una auténtica revolución en estos dos últimos años, trasladándose al mercado de bienes y servicios y convirtiéndose –como era esperable- en el motor fundamental de la actual inflación.

6.     Una cuestión esencial para interpretar esta revolución monetaria es en qué medida el resultado de generar inflación ha sido o no premeditado. De los documentos elaborados al respecto por las distintas instituciones monetarias y financieras, podemos extraer fácilmente un hilo conductor.

7.     En primer lugar, como hemos anticipado, el origen público de estas nuevas políticas se encuentra precisamente en un documento elaborado y difundido por BlackRock el 15 de agosto de 2019[1] y, por lo tanto, es anterior al estallido de la pandemia. De esta forma, sabemos que el origen de esta revolución monetaria no es la reacción frente a la pandemia COVID 19, aunque esta última haya amplificado su despliegue, sino que precede en unos cuantos meses a la misma.

8.     A partir del proyecto BlackRock, a lo largo del otoño de 2019, los bancos centrales -y, sobre todo, la Reserva Federal y el BCE- adoptan medidas claramente revolucionarias destinadas a dar un salto cualitativo en la expansión monetaria, medidas que intensificarían en la primavera del 2020 a partir del estallido de la pandemia.

9.     A fines del 2020, el propio BlackRock reconoce, sorprendentemente, que las medidas adoptadas son claramente inflacionarias[2] y han cambiado radicalmente el contexto monetario haciéndose previsible una clara evolución inflacionaria[3].

10. A la vez, en las mismas fechas, BlackRock realiza una valoración ambigua del proceso inflacionista, en la medida en que reconoce que la inflación es o puede ser un buen instrumento –quizás inevitable- frente a la necesaria reestructuración financiera de Occidente. En concreto, alude a que, frente a la austeridad o a los impagos o condonaciones masivos –con un importante coste político- las altas tasas de inflación o la hiperinflación, son instrumentos esenciales para hacer políticamente viable el desapalancamiento financiero[4] imprescindible para la supervivencia de la economía occidental y para la puesta en práctica del proyecto Gran Reinicio.

11. Los documentos parecen indicarnos con suficiente claridad que el actual proceso inflacionario:

a)     se originó en políticas diseñadas y aplicadas ya en 2019, a sabiendas de sus repercusiones sobre la inflación

b)     se manifestó con suficiente claridad ya en otoño de 2020

c)      ha sido probablemente premeditado, como un instrumento para hacer frente al gran reto estructural de la economía occidental, que no es otro sino el masivo sobre-endeudamiento acumulado.

“EL FUTURO DE EUROPA. Bases para un nuevo modelo”
Otros documentos de EKAI Center
ENTIDADES COLABORADORAS:



[1] “Dealing with the next downturn: From unconventional monetary policy to unprecedented policy coordination”. Blackrock Investment Institute. 15 de Agosto de 2019

[2] “Preparing for a higher inflation regime” Blackrock Investment Institute. SUERF Policy Notes. Diciembre 2020.

[3] BARTSCH, Elga (BlackRock Investment Institute. Head of Economic and Markets Research): “We see inflation risks in coming years”. In “The long march to deleveraging”. IPE. Septiembre 2020.

[4] “Any unsustainable debt overhang eventually will have to be dealt with through austerity, default or inflation. Presented with these options, inflation would likely be seen as the most politically palatable solution”. BARTSCH, E., o.c.